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La Asociación Colombiana de Ciudades Intermedias – Asointermedias manifiesta su profunda preocupación y rechazo por la situación crítica que enfrenta la Región del Catatumbo y de manera especial, a nuestra ciudad intermedia de Ocaña debido a la escalada de violencia que ha dejado un saldo de 80 víctimas fatales, secuestros y más de 19 mil desplazados, generando una crisis humanitaria que desborda las capacidades locales de atención.

Como ciudad intermedia y asociada a Asointermedias, Ocaña ha demostrado su compromiso humanitario al recibir a cientos de personas que buscan refugio. Desde nuestra asociación, reconocemos el esfuerzo conjunto liderado por el alcalde Emiro Cañizalez, junto con instituciones, autoridades y organismos de socorro, para atender a las víctimas de esta crisis. Acciones como la reciente «Gran Donatón» reflejan la solidaridad y el compromiso de los ocañeros, pero también evidencian la urgencia de una intervención inmediata por parte de los gobiernos departamental y nacional.

“La situación en el Catatumbo es lamentable, el accionar de la guerra ha producido decenas de muertes; tan alarmante es, que la suma de muchas de las masacres más horrorosas no alcanza a lo que estamos viviendo hoy, es una situación sin precedentes, con miles de desplazados, niños, ancianos, familias enteras que requieren una atención prioritaria del Estado.” Afirmó Santiago Ospina, el director de Asointermedias.

Desde Asointermedias agradecemos los esfuerzos hechos por las autoridades locales, destacamos el valor de los alcaldes para afrontar la situación, al Gobierno Nacional, las Fuerzas Militares, la Policía Nacional y a todos los actores políticos para continuar redoblando sus esfuerzos para garantizar la seguridad y protección de la población civil, con especial énfasis en la defensa de los derechos humanos.

Finalmente, hacemos un llamado a los organismos internacionales a que se haga una verificación de las condiciones de los desplazados y posibiliten ayuda para que nuestros mandatarios locales puedan garantizar los derechos fundamentales de toda la población afectada por esta crisis humanitaria